miércoles, 29 de junio de 2016

La etapa de las preguntas


Entre los 3 y los 5 años, los niños suelen pasar por la etapa de las preguntas. Esta fase es normal e indica que el lenguaje y el pensamiento de los niños se desarrollan adecuadamente. Es una etapa en la que los padres pueden aprovechar para fomentar la comunicación con sus hijos. La edad de las preguntas constituye un momento muy propicio para favorecer el desarrollo de las habilidades comunicativas de los niños.

Todos los niños pasan por una etapa que se caracteriza por las constantes preguntas. Esta etapa se produce entre los 3 y los 5 años. Esta fase tiene una duración variable y se corresponde con el desarrollo del lenguaje y del pensamiento de los niños de esta edad.

Las preguntas de los niños que están pasando por esta fase pueden ser repetitivas, disparatadas, divertidas o inverosímiles. Todo esto es normal en esta etapa. Los niños preguntan porque tienen una curiosidad innata, quieren explorar todo lo que hay a su alrededor.

Entre los 3 y los 5 años, el lenguaje infantil experimenta un gran desarrollo. 

Este desarrollo permite a los niños pedir y dar información, expresar dudas y sentimientos y seguir conversaciones. Estas nuevas capacidades se relacionan con la fase de las preguntas. El niño ya puede investigar su entorno a través del lenguaje, preguntando lo que quiere saber.

Asimismo, el niño experimenta sus nuevas capacidades lingüísticas. Ahora que puede pedir información y entender las repuestas, ejercita esta habilidad a base de hacer preguntas constantes. De esta manera, el niño va adquiriendo mayores destrezas lingüísticas.

Del mismo modo, el niño ejercita sus habilidades de comprensión del lenguaje procesando la información que el adulto le da en sus respuestas. Esto también le sirve para aprender palabras nuevas.

¿Cómo deben actuar los padres en la fase de las preguntas?
La fase de las preguntas es una etapa normal del desarrollo de los niños. Indica que el lenguaje y el pensamiento del niño evolucionan adecuadamente. Por ello, los padres deben participar con sus hijos cuando entran en esta fase.

Los padres deben fomentar la curiosidad natural de sus hijos, puesto que esto favorecerá el gusto por aprender de los pequeños.

Los padres deben responder a las preguntas de sus hijos, aunque éstas sean repetitivas o inverosímiles.

Las respuestas deben ser sencillas y realistas, para que los niños puedan comprenderlas.

Siempre que sea posible, es positivo dar nueva información en la respuesta, para que los niños aprendan algo que no conocían. No obstante, es importante no excederse en la transmisión de conocimientos nuevos.



miércoles, 22 de junio de 2016

¿Qué podemos hacer para que nuestros hijos sean más seguros?

 
Un diálogo fluido, sentido del humor, reconocer el esfuerzo ante el fracaso, ser realistas... son algunas de las pautas para que los padres alejen a sus hijos de sus inseguridades.
Dicen que «de padres inseguros se crean niños inseguros», afirmación que no está muy alejada de la realidad. No hay que olvidar que los hijos son un reflejo de lo que hacen y dicen sus padres.
Sin embargo, vivimos en un mundo cada vez más competitivo y muchos padres muestran gran interés por lograr que sus hijos sean más seguros y autónomos, pero no saben cómo conseguirlo. Desde la Dirección de Familia de la Comunidad de Madrid, aconsejan seguir una serie de pautas:
—Es importante crear un ambiente cordial y relajado, donde el buen humor y las risas estén presentes.
—Los padres deben transmitir su confianza a los hijos. Hay que reconocerles lo que hacen bien, su esfuerzo, y al tiempo animarles ante las dificultades y manifestarles que estamos seguros de sus posibilidades para lograr los objetivos marcados.
—Es necesaria una actuación conjunta de padres y educadores para unificar criterios e implicarse en los niños día a día.
—Hay que ayudar a los hijos a ser realistas. No hay que ver la realidad como una limitación, sino como un hecho que debemos conocer para asumirlo y, cuando sea factible, superarlo.
—Conviene actuar con convicción, calma, decisión. El diálogo es imprescindible. Para los niños, un padre convencido es un padre que transmite seguridad, y este sentimiento es tan fuerte que prevalece en ellos, incluso cuando, en ocasiones, vean que sus padres se equivocan.
—Les mostraremos la importancia y el valor del esfuerzo y si finalmente no logran el objetivo, se les reconocerá su tesón.
—Es importante que escuchen cómo sus padres hablan en conversaciones con otras personas lo contentos y satisfechos que están con sus hijos.
—Hay que ayudarles a aceptar las peculiaridades de cada persona, las facilidades y dificultades que puedan tener en los diferentes ámbitos.
—Es aconsejable que se valore al máximo su forma de relacionarse con los demás, de manera que se potencie su capacidad para escuchar, compartir y generar sentimientos de amistad y afecto.
—Se debe ayudar a los hijos a que asuman las rectificaciones como un hecho natural, sin dramas, y enseñarles que de cada fallo se presenta una oportunidad para aprender y crecer.


Artículo tomado de internet
www.abc.es/20120830/familia.../abci-ninos-seguros-autoestima-